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28/10/13

Noroccidente de Caldas: Un territorio forjado en oro, panela y café


 




 

Noroccidente de Caldas:
Un territorio forjado en oro, panela y café

 



Imagen 1. Otto Morales Benítez, Danilo Cruz Vélez e Iván Cocherín, tres personajes asociados al territorio. Fuente: http://www.bdigital.unal.edu.co/10401      

 

 

Por Gonzalo Duque Escobar *

La Vicerrectoría de Sede de la Universidad Nacional de Colombia y su Dirección de Investigaciones (DIMA) presentan este documento de soporte para facilitar la construcción de una Visión de la Subregión del Noroccidente de Caldas, en el marco de un trabajo participativo e interinstitucional  liderado por la Gobernación de Caldas, a través de la Secretaría de Planeación con el apoyo de la GIZ.   


El territorio

 



Imagen 2. Mapa de la Subregión Noroccidental de Caldas (adaptado), en: http://godues.wordpress.com/2012/11/13/

 

          Esta subregión  caldense  está conformada por los municipios de Filadelfia, La Merced, Marmato, Riosucio y Supía, cuya orografía pertenece al sistema andino y se establece en el cañón del Río Cauca.

          La conectividad interna, mirando en especial a Caramanta, Jardín, Valparaíso y Mistrató, más que importante resulta fundamental dado el papel del transporte rural como catalizador de la reducción de la pobreza.

          Los principales renglones económicos del sector  agropecuario en la subregión, son: caña panelera, café, plátano y productos de pan coger. A estos se suman otros productos promisorios. En la minería, el oro. en primer lugar, y la plata y el carbón, históricamente han sido los principales renglones productivos.

          Mientras el occidente caldense es reconocido desde la Colonia por su vocación minera centrada en el potencial aurífero de Marmato, Supía y Riosucio, la ruta de la colonización antioqueña del siglo XIX, entró a Caldas por la vertiente oriental del río Cauca, donde se localizan La Merced -antes corregimiento de Salamina en cuya jurisdicción queda la Felisa-, y Filadelfia, la tierra del notable filósofo Danilo Cruz Vélez.

La población

 La subregión está poblada por 109 mil habitantes, de los cuales 35 mil habitan las cabeceras y 74 mil las áreas rurales.

Tabla 1. Subregión Noroccidente de Caldas 2011 (DANE)
Municipio
Personas en NBI (%)
Personas en miseria (%)
Población (miles)
Filadelfia
32,00
6,27
12,4
La Merced
32,89
8,28
6,8
Marmato
29,30
7,35
8,2
Riosucio
31,30
7,40
57,2
Supía
29,56
6,01
24,8
Subregión
30,94
7,03
109,4
Caldas
29,18
6,16
984.1

 


Los grupos humanos del territorio, parten de las etnias indígenas (Embera-Chamí y Umbra) y afrodescendientes, históricamente discriminadas, y de grupos de origen europeo que a partir de la conquista han ostentado los beneficios del poder. Hoy, a pesar del mestizaje, existen grupos raizales de indígenas y de afros que requieren reconocimiento.

Mientras las etnias amerindias cuentan con el Centro de Capacitación e Integración Indígena Ingrumá, la Asociación de Cabildos Indígenas de Caldas y el Consejo Regional Indígena de Caldas que vela por la defensa del territorio y de los derechos individuales y colectivos, en el caso de las comunidades afrodescendientes preocupa la dispersión de esfuerzos, consecuencia del elevado número de organizaciones (12).

La Comunidad de la vereda Guamal en Supía constituida por cerca de 1000 afrocolombianos, cuya autonomía se le ha reconocido, lucha por ampliar su territorio vecino al resguardo de Cañamomo y Lomaprieta.

Para valorar y aprovechar las fortalezas naturales y culturales de este territorio, habrá que tomar como referentes a Riosucio y Salamina, y hacer mención de Marmato, dado que son dos los grandes escenarios de este territorio: el de la colonial provincia de Marmato ubicado al oeste del río Cauca, y el de la provincia del sur de Antioquia por la otra vertiente. (Ver mapa al final).

En la pasada década fueron notables dos focos de actores armados, los paramilitares por el Este de la subregión, y la guerrilla con frentes de las FARC y del EPL por el Oeste.

 

La cultura

 

 



Imagen 3. Marmato, en: www.pasc.ca , y pintura del Maestro Luis Guillermo Vallejo, en: www.bdigital.unal.edu.co

 

Los habitantes de la “Tierra del café”, poseen una cultura donde inciden los determinantes de la caucanidad y la antioqueñidad, relacionados con los modos de producción de la minería de la Colonia y de la explotación agrícola a lo largo del siglo XIX.

Por lo dicho antes, el territorio comporta un doble carácter: por  el poniente el de la cultura minera en una tierra de resguardos y negritudes, que es además panelera: en el oro de Marmato y Riosucio existe más novela y poesía que en el café. Y por el naciente, la cultura cafetera  de los poblados fundados sobre la ruta de colonización, que se expresa en las chivas, el bahareque de guadua, los Ferrocarriles Cafeteros y la música de carrilera.

Durante la Colonia, la producción de oro en la Nueva Granada se dio casi toda en el Cauca y Antioquia, una y otra con los siguientes modos: la caucana soportada por esclavos africanos y la antioqueña por el trabajo del minero independiente. Ya en tiempos de la naciente república y de las guerras civiles que cierran el siglo XIX, mientras en los dominios de los poblados coloniales del occidente, la producción se soporta en el régimen de servidumbre propio de las grandes haciendas caucanas, del lado antioqueño se fundamenta en  el trabajo del colono que ha tomado posesión de baldíos o en el sistema capitalista al que evoluciona la nueva caficultura, modo de producción que acentúa y moldea el carácter definitivo del caldense.

 

El Medio Ambiente

 

 



Imagen 4A: Zonificación ambiental de Marmato Supía y Riosucio. Fuente, Corpocaldas.

 

 



Imagen 4B: Usos del suelo y coberturas, y Ecosistemas estratégicos, del Noroccidente de Caldas. Fuente, Corpocaldas.

 

          En lo ambiental, además de las problemáticas de la minería ilegal y de la contaminación de aguas con cianuro y estériles de las zonas mineras, deben considerarse: el ordenamiento de microcuencas, y el estricto control y reconversión de esa actividad extractiva.

          Entre los temas de Marmato, sobresalen la oferta hídrica del río Arquía y la carencia de agua para el consumo humano y para la minería, actividad que ha agotado las fuentes hídricas vecinas y los bosques, afectando de paso los corredores de conectividad biológica.

          Lo anterior obliga a evaluar la pertinencia de los planes de manejo ambiental en el marco de unas políticas públicas integrales de desarrollo rural, con prácticas agroforestales y silvopastoriles.

          El tema de los riesgos asociados a las dinámicas antrópicas (minería) y del calentamiento global, es una tarea que invita a resolver además de los usos conflictivos del suelo, los manejos inapropiados de los recursos naturales.

          El saneamiento básico y el suministro de agua potable, son problemáticas centrales de este territorio, pero sobre todo temas fundamentales para Marmato.

          El Paisaje Cultural Cafetero PCC, podría desencadenar opciones de desarrollo, de implementarse un Plan de Manejo que también se exprese en los planes de ordenamiento de las cuencas y de los entes territoriales.

          Igualmente, para darle coherencia a las acciones ambientales y sociales del PCC, se deben emprender políticas públicas y sectoriales que consideren la adaptación al calentamiento global y estrategias para cerrar la brecha de productividad de los productores rurales.

 

La economía

 




Imagen 5.  Diagrama: Árbol de problemas causa y problemas consecuencia, tomado de documento de la centenaria Cámara de Comercio de Manizales.

 

          Entre las oportunidades para desarrollar el territorio, se tienen: a) la declaratoria del Paisaje Cultural Cafetero; b) el carácter triétnico y herencia cultural diversa; c) los procesos sociales e históricos del territorio; y d)  Marmato, poblado reconocido por su pasado y por su potencial aurífero.

          El carácter rural y pluriétnico de este territorio, se puede acentuar mediante programas de restitución de tierras y educación propia para las comunidades especiales afro e indígenas, previniendo el impacto de los enclaves mineros que amenazan con desestructurar el territorio.

          Y por su carácter fundamentalmente campesino, la oferta de bienes y servicios puede detonar un desarrollo rural soportado en productos estratégicos como la panela y los cafés especiales, y en la oferta bienes culturales (artesanías y típicos de la gastronomía local), actividades culturales (encuentros y jolgorios del folclor ), uso de recursos paisajísticos asociados a la cultura (resguardos, palenques y arquitectura del bahareque) y de servicios ambientales en las áreas de interés natural (los cerros y el río).

          Falta resolver la brecha de productividad e ingresos dos aspectos ligados entre sí que empobrecen tanto a esta subregión como a la provincia caldense, e incorporar políticas de ciencia, tecnología y cultura orientadas a elevar la productividad, tanto de los sectores artesanales y rurales, como del trabajo humano.

          Entre los temas prioritarios para el sector extractivo, puede contemplarse entre las alternativas la gran minería a cielo abierto que puede dejar sin pasado ni futuro a los marmateños, o la de fortalecerse una minería artesanal asociativa y amigable con el medio ambiente, orientada a incorporarle al oro valor agregado en productos con expresión de la cultura local, actividad extractiva que puede complementarse con una minería industrial subterránea para acceder a las mayores profundidades del macizo rocoso, sin perjuicio de la minería artesanal.

 

Un referente: Riosucio

 



Imagen 6. Izq. Templo de La Candelaria en Riosucio, por Jorge Londoño. Der. Máscaras del Carnaval del diablo de Riosucio, en colombia.travel y propiedades.com.co

 

          Riosucio es el núcleo de artesanía folclórica más antiguo de Caldas: la tradición precolombina asociada a las parcialidades indígenas, se ha perpetuado en sus resguardos indígenas de Nuestra Señora Candelaria de la Montaña, Cañamomo y Lomaprieta, San Lorenzo y Escopetera – Pirza.

          En la cabecera municipal existen talleres de talabartería, tallados y tejeduría de fique.

          Igualmente, sobresalen: la alfarería en Cañamomo y Lomaprieta; la cerámica de Portachuelo, la cestería de bejuco de la Zulia y El Salado en la Montaña y en San Lorenzo; las esteras de enea y caña brava de la Montaña; las artesanías en cogollo de caña brava y la sombrerería en Travesías y Pasmí en San Lorenzo; y las tallas en palo de naranjo de Tumbabarreto.

          El Carnaval del diablo en Riosucio, según lo expresa el Sistema Nacional de Información Cultural*, es la demostración de la cultura de un pueblo que se formó con la integración indígena, negra africana y blanca europea: “se trata de un extenso poema dramático y colectivo, escrito por “matachines” o carnavaleros locales”.

          * Ref.: http://www.sinic.gov.co

 

 

 

Un referente: Salamina


 

Imagen 7.  Acuarelas de Salamina, Caldas, por Luis Fernando Rodríguez.

Si Caldas y la subregión desean aprovechar mejor la declaratoria del Paisaje Cultural Cafetero, deben empezar por Salamina , por ser el principal referente patrimonial de la declaratoria en la ecorregión cafetera, además de un potencial atractor de territorios en el norte y noroccidente caldenses, donde facilita la articulación de poblados con historia, etnias y paisajes diversos.

La arquitectura patrimonial salamineña en la agenda cultural de la ruta de la colonización, puede generar sinergias con eventos como el Carnaval del Diablo y el Encuentro de la Palabra de Riosucio, y con el Encuentro de Escritores Danilo Cruz Vélez de Filadelfia, o de Ferias como la de la Colación en Supía y de Fiestas como las de San Antonio y del Oro en Marmato.

En 1995, ante el entonces alcalde electo de Salamina Luis Guillermo Velásquez, François Widemann del CNRS de Francia y Luis Gonzalo Valencia del Ministerio de la Cultura de Francia, acompañados de un grupo de Profesores de la UN, propusieron acometer el proyecto de la declaratoria de Salamina como Patrimonio Arquitectónico de la Humanidad, acordando tareas que desafortunadamente no lograron su cometido, pero susceptibles de reemprenderse si los actores sociales del territorio lo deciden. 

 

Plataforma Logística de La Felisa

 



Imagen 8. Ferrocarriles en Colombia 1836-1930. Jorge Arias de Greiff. En banrepcultural.org

 

          La convergencia de vías en la Felisa: el Tren de Occidente con su banca comprometida por la minería ilegal y la Autopista de la Prosperidad en curso avanzando entre Medellín y La Virginia, además de la Carretera de Occidente (1939) que lleva a Riosucio y Anserma, y de la Transversal de Caldas objeto del Plan 2500 que conduce a Salamina, como corredores de conectividad avanzando en varias direcciones, y la vía a La Manuela que permite por el Sur vincular el territorio al área de influencia directa del futuro Aeropuerto del Café , son factores determinantes que pueden detonar condiciones para desarrollar una Plataforma Logística en La Felisa.

          Lo anterior facilitaría, además de la oferta de bienes y servicios culturales, expresión de la minería colonial ubicada del lado de Anserma (1539) y Supía (1540) y de la ruta de la colonización antioqueña enaltecida por el costado de Salamina (1825) y Filadelfia (1850), desarrollar sinergias empresariales articuladas al Parque Industrial del KM 41 previsto por la Corporación para el Desarrollo de Caldas (1989), para que se establezcan industrias químicas de base minera de conformidad con los perfiles de proyectos formulados para Caldas por Gabriel Poveda Ramos (2006), cuando las condiciones del transporte con el advenimiento del Tren de Occidente resulten competitivas.

          La reducción de los costos del transporte entre tres y cuatro veces asociada al medio férreo como sustituto el modo carretero, invita a explorar  estas posibilidades, entre las que se incluye la eventual explotación de los yacimientos aún por evaluar del Carbonífero de Antioquia, que aflora por Riosucio, Quinchía y Caramanta, para producir carbón licuado.

 

La ruta del Oro

 


Imagen 9. Arriba,  Marmato la tierra de Iván Cocherín. Abajo, Iconografía de la cultura Umbra para el Museo Interactivo Samoga.

          Con el nombre de Marmato asociado al vocablo “marmaja”, mineral que los aborígenes Cartamas molían sobre piedras para extraer el oro, se identifica este histórico poblado anclado sobre los riscos del cañón del río Cauca, en una zona aurífera cuyo nombre honró Juan B. Boussingault al denominar marmatita a una variedad del mineral esfalerita.

          En el Siglo XIX cuando la Nueva Granada generaba cerca del 40% del oro del mundo, Quiebralomo aparecía como la primera mina del orbe. Igualmente, la Misión Boussingault (1822-1836) al centrar su interés en el oro y la plata de Marmato, Supía y Riosucio, subraya ese carácter en el histórico territorio.

          Marmato, el emblemático municipio minero de Caldas que fue prenda para financiar nuestra independencia, pasa por un proceso en el que tendría que conceder su patrimonio histórico y desmantelar la minería artesanal como actividad productiva de su propia esencia. Frente a esta problemática, la apuesta podría ser por una minería artesanal limpia, que le incorpore un valor agregado al preciado metal, inspirado en los íconos de la cultura Umbra, cuya lengua fue identificada en el lugar por los etnógrafos Guillermo Rendón y Anielka Gelemur (1995).

 

La ruta del Café


 

Imagen 10. Pinturas sobre el PCC: Arriba, obra de Luis Guillermo Vallejo, Abajo, obras  Juan Ruiz y Alfonso Espinel.

 

          Una estrategia formidable para hacer del Paisaje Cultural Cafetero un factor de desarrollo, es la implementación del “bioturismo”, concepto que articula el ecoturismo y el turismo cultural, apalancado con un programa de “vías lentas” que cruce estos “poblados lentos” del noroccidente caldense.

          Mientras el monocultivo del café sin sombrío, responde a un modelo agroindustrial, soportado en productos de base química, la caña panelera y los cafés especiales pueden avanzar en un escenario amigable con el ambiente, como es la producción rural y artesanal.

          El Paisaje Cultural Cafetero es un compromiso cuya sostenibilidad exige la recuperación del paisaje deforestado y de la biodiversidad.

          El bioturismo que se soporta en la cultura autóctona y en la biodiversidad, exige la reconversión del actual modelo socio-ambiental, emprendiendo una producción limpia de tipo rural y artesanal para la oferta de bienes culturales y de servicios ambientales certificados con identidad del lugar, además del transporte rural, de una revolución educativa y del fortalecimiento de las organizaciones de productores, controlando los eslabones de la cadena productiva.

 

La ruta de la panela

 

 



Imagen 11. Izq. Trapiche en  banrepcultural.org  Der.Indígenas embera – chamíes. ElEspectador.com

 

Riosucio y  Guamal cuentan con una tradición panelera de más de 100 años, en la producción de caña y su transformación en panela artesanal.

Entre el 2001 y 2010, el sector primario participó con el 13,5% del PIB de Caldas,  donde el café representó el 4,5% y otros productos agrícolas, en especial caña, plátano y cítricos, el 3,9%. De las 327 mil toneladas producidas en 2007, cerca de 76 mil fueron de caña panelera, donde Caldas participa con el 6% del total nacional, y 33 mil de caña de azúcar. Allí, Caldas y Risaralda participan por partes iguales, sumando el 2,6% de la producción nacional. Entre 2007  y 2009, las hectáreas sembradas en caña en Caldas, se redujeron de 19,4 mil  a 16,3 mil.

En contraste a la industria azucarera, la producción  panelera que se realiza en pequeñas explotaciones campesinas se realiza con procesos artesanales intensivos en mano de obra con una alta participación de trabajo familiar.

Dentro del sector agropecuario, en Supía y Riosucio descolla  la caña panelera, mientras que en Filadelfia, La Merced  y Marmato participa en menor proporción.

Entre los instrumento a evaluar y fortalecer, están el Centro Tecnológico de la Panela de Supía, la Asociación de Productores de Panela de Bonafont y los paneleros de Guamal, para intentar  la construcción de sinergias orientadas al desarrollo del sector  artesanal y al fortalecimiento de las cadenas productivas.


 

Epílogo

 

 
 
Imagen 12. Provincias del Departamento de Caldas en 1905. Libro Centenario SMP de Manizales.

Este material que recoge los aportes de un grupo de trabajo interinstitucional, donde participan la academia, el sector empresarial, las ONG, el Estado y en especial la Autoridad Ambiental y los cinco entes territoriales municipales, liderado por la Gobernación de Caldas a través de su Secretaría de Planeación con el acompañamiento de la Agencia Alemana de Cooperación GIZ, se propone facilitar un proceso de construcción participativa para lograr una visión de la subregión del noroccidente caldense, desarrollada por  los actores sociales estratégicos del territorio.

El territorio entendido como una construcción social e histórica, antes que un objeto de transformación es un sujeto, puesto que las  relaciones entre el medio ambiente y las colectividades humanas que lo habitan, son unas relaciones dialécticas cuyo producto es la cultura: de ahí que el desafío colectivo sea encontrar una solución a las problemáticas de los cinco municipios del noroccidente caldense transformando en oportunidades las ventajas naturales y culturales para lograr una visión sostenible del territorio, con un desarrollo socialmente equitativo, económicamente viable y ecológicamente responsable.

 

Fuentes:


 Análisis de la agroindustria caldense y sus Perspectivas de desarrollo. Cardona C.A.; Orrego C. E. Tamayo J. A. U. N. de Colombia, Manizales, 2010.


 Caracterización De La Comunidad Afrocolombiana En Caldas, Convenio Gobernación De Caldas – Corporación Colombia Actuando. Documento suministrado por la S.P. de la G. de Caldas, sin fecha.

  Carta estadística de Caldas 2010-2011. Secretaría de Planeación. Gobernación de Caldas.  Datos actualizados por la SP de Caldas.

 Cátedra Manuel Ancízar. Tierra y Territorios en Colombia. Sesión 11: Globalización, libre comercio y desarrollo Rural. Universidad Nacional de Colombia.13 de mayo 2011.

 Ciencia, tecnología y ruralidad en el POT de Caldas. In: http://www.bdigital.unal.edu.co/9875/

 Eje Cafetero: fortaleza minero-industrial y posibilidades agropecuarias, en: http://www.bdigital.unal.edu.co/6656/ 

 El carácter amable, pujante y laborioso del cafetero, en: http://godues.wordpress.com/2012/06/11/

 El Departamento de Caldas frente a los objetivos de desarrollo del milenio. Documento UAM-PNUD-DNP, en: http://www.pnud.org.co

 El Espejismo de Marmato, por Alfredo Molano Bravo/ Especial para El Espectador. 01/10/2011. http://gduquees.blogspot.com/2011/10/el-espejismo-de-marmato.html

 El Territorio Caldense hace 200 años. Los Sectores Sociales en la Independencia. Por: Albeiro Valencia Llano ( 2011). http://academiacaldensedehistoria.blogspot.com/2011_02_01_archive.html

 Composición de la Economía de la Región Eje Cafetero de Colombia . F. H. Valencia ; D. M. Cortázar ; A. M. López. Ensayos sobre Economía Regional. Banco de la República. 2013. http://www.banrep.gov.co/

 Gestión del riesgo en Manizales, en: http://godues.wordpress.com/2012/06/21/ 

 La “Perla del oriente” caldense, en: http://godues.wordpress.com/2013/10/14/

 La identidad del territorio caldense, en: http://godues.wordpress.com/2013/07/08/

Manizales: integración regional y desarrollo territorial http://godues.wordpress.com/2013/08/17/

 Notas de interés para el desarrollo de Caldas y Manizales, en: http://godues.wordpress.com/2011/08/16

 Paisaje Cultural Cafetero: Bioturismo y ruralidad en la Ecorregión Cafetera, en: http://www.bdigital.unal.edu.co/4541/ 

 Pobreza y ruralidad cafetera, en: http://godues.wordpress.com/2012/12/24/ 

Producción de panela como estrategia de diversificación en la generación de ingresos en áreas rurales de América Latina. G Rodríguez, H. García, Z. Roa, P. Santacoloma. AGFS FAO. Roma 2004.

 Prospectiva para el desarrollo magdalenense. http://www.bdigital.unal.edu.co/6576/

 Riosucio y Supía. Gutiérrez, Rufino, 1854-1923. http://www.banrepcultural.org/taxonomy/term/13895

 Retrospectiva histórica de la minería en Marmato, en: http://godues.wordpress.com/2012/02/26/

 Salamina patrimonial y emblemática, en: http://godues.wordpress.com/2012/08/20/

 Salamina, Caldas 187 años: “desarrollo rural en la región cafetera”. In: http://www.bdigital.unal.edu.co/6732/

 Seis diálogos con el territorio. Duque-Escobar, Gonzalo (2013). Módulo de la Maestría en Medio Ambiente y Desarrollo. Escuela de Arquitectura U. N. Sede Manizales. http://godues.wordpress.com/2012/05/13/

 Seis girasoles emblemáticos para la problemática socioambiental de Caldas, en: http://godues.wordpress.com/2013/06/09/

 Subregión Noroccidental de Caldas: dimensión social, en: http://godues.wordpress.com/2013/10/08/

 Temas cívicos para agendas de desarrollo regional. In: http://www.bdigital.unal.edu.co/7240/

 Temas de Ciencia, Tecnología, Innovación y Educación, en: http://godues.wordpress.com/2012/06/22/ 

 Temas de ordenamiento y planificación del territorio, en: http://godues.wordpress.com/2012/01/27/ 

 Un diálogo con el Paisaje Cultural Cafetero, en:  http://www.bdigital.unal.edu.co/7038/


 Un territorio forjado en oro y café, en: http://godues.wordpress.com/2013/09/30/

 Visión retrospectiva y prospectiva del desarrollo regional, en:  http://www.bdigital.unal.edu.co/2400/

 

Gracias

* Gonzalo Duque Escobar: Profesor  de la Universidad Nacional de Colombia, Miembro del Concejo Regional de Ordenamiento Territorial de Caldas, e Integrante del Grupo de Trabajo “Estrategia de Visión  para la Subregión del Noroccidente de Caldas”. http://godues.wordpress.com

 

Manizales, 23-10-1013.