4/12/09

POR UNA RED DE ASTRÓNOMOS PROFESIONALES PARA COLOMBIA




Por Gonzalo Duque-Escobar.

En estos días cuando estamos clausurando el Año Internacional de la Astronomía IYA 2009 y luego de haber logrado desplegar multitud de labores muchas de las cuales presentamos en estas Circulares RAC, también debemos reflexionar un tanto sobre la razón de ser de la Red de Astronomía de Colombia y sobre la necesidad de blindarla como una organización de hecho que ha logrado reunir a la gran mayoría de los astrónomos aficionados y autodidactas del país, pero igualmente que ha convocado a pocos de los no muchos profesionales de esta ciencia.

Sin vacilaciones deberemos empezar por reconocer la falta de una asociación de astrónomos profesionales en Colombia como complemento natural para la misión que se ha propuesto la RAC en esta difícil y larga tarea de construir una ciencia para la Nación: una y otra surgidas de forma autónoma y libre, serían dos organizaciones independientes nacidas desde la sociedad civil, comprometidas con la astronomía en y para Colombia, y con funciones diferentes pero complementarias.

Mientras la existencia de la RAC se explica mejor por la necesidad de reconocernos desde la astronomía, de compartir experiencias y saberes resultado de las actividades y espacios que se abren y construyen entre nosotros, por la necesidad de constituirnos en red de actores interesados en la apropiación social de la ciencia y la tecnología, de actuar como colectivo para endogenizar esta ciencia o para conocerla, urge la necesaria conformación de una organización de astrónomos profesionales e investigadores, como complemento estratégico para alcanzar otros objetivos que están más allá de nuestra capacidad, pero que le dan sentido y continuidad a nuestras labores de fomento, educación y difusión científica en la base, creada por fuera de la RAC como instrumento necesario y autónomo para el intercambio de científicos, la conformación de grupos y redes de investigadores aplicados a la astronomía y ciencias afines, y sobre todo, para contribuir con nosotros a la creación de una visión sobre ciencia que le dé respuestas e identidad a la Nación. Con esta asociación, más que importante necesaria, ahora que existen el programa de pregrado de la Universidad de Antioquia y de maestría en la Universidad Nacional de Colombia podemos transformar en una valiosa oportunidad para la astronomía en Colombia lo que ayer se denominaba fuga de cerebros y se calificaba de grave pérdida de capital humano, para bien de sus graduados. Ciertamente situaciones e historias de vida como las de Adriana Ocampo, Alberto Rodríguez, David Ardila y Jaime Forero entre más, son hoy una consecuencia natural de la apertura del mercado en un mundo globalizado para países como Colombia, donde faltan escenarios idóneos para la investigación.

Y la creación de esta nueva asociación no significa que unos salgan de aquí para ella: simplemente se podrá participar en ambas o en una de ellas de acuerdo a nuestro perfil e interés. Igualmente, habrá eventos y temas diferentes a los que algunos podremos asistir como pares académicos y otros a los que no en virtud de nuestra formación, e igualmente otros programas que no serán del interés de todos. Algunos afiliados de la organización astronómica de complemento, de seguro serían miembros de la RAC. Si de algo debemos estar seguros, es de que con o sin personería jurídica existimos y logramos hacer cosas, de que no en vano llevamos a cuesta doce años de labores casi todas silenciosas a lo largo y ancho del país, y de que hemos mantenido una presencia cuyo reconocimiento internacional se ha materializado y puesto en evidencia durante el IYA 2009, gracias a la meritoria gestión de nuestro Presidente José Roberto Vélez y al esfuerzo de todos.

Desde el OAM, Ed. Circular RAC 543.
http://www.manizales.unal.edu.co/oam_manizales/